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    El pasado miércoles 21 de noviembre recibimos en nuestras oficinas a Raúl Peláez, responsable de tecnología deportiva, innovación y análisis en el FC Barcelona. Raúl nos habló de la importancia del trabajo en equipo y de la inteligencia colectiva, justamente en este último trimestre que lo estamos dedicando a nuestro valor #FUNtasticTeamPlyers.

    Al inicio de la charla, Peláez nos contó los orígenes de la forma de trabajar del Barça, que hasta hace poco tiempo era única. Para entenderlo, tenemos que comprender que el FCB no es el equipo más rico del mundo, y es difícil que lo sea, por ello decidieron apostar por el talento y por la innovación como única ventaja competitiva que les podría hacer diferente de los demás. Y parece que lo han logrado.

    Desde los equipos de La Massia hasta los jugadores del primer equipo entienden el juego como un colectivo. Todos atacan y todos defienden. Todos aportan su granito de arena que hace que el equipo tire adelante. No todos los jugadores del Barça tiene buena forma física, o son buenos marcando goles, o corren muy rápido. Lo que busca el Barça son personas diferentes, capaces de entender el fútbol en su conjunto y conocer a su equipo al máximo para tomar las mejores decisiones. Y esto se consigue con una filosofía, una forma de hacer las cosas, independientemente de los presidentes, entrenadores, jugadores… que haya en cada momento.

    Y esto no solo se lleva a cabo entre los jugadores. También en los profesionales del club. El equipo de analistas que dirige el propio Peláez funciona así. «Yo les doy confianza, les dejo que tomen decisiones. Son autónomos pero se apoyan y juntos mejoran», explica. «Es evidente que habrá errores, y aprenderemos de ellos. Lo más importante es que no los escondan y sean sinceros con todo el equipo». Y culmina diciendo que «la confianza es básica para que la gente pueda tomar sus propias decisiones».

    Y esta filosofía es más visible, evidentemente, en el equipo de primera división. «En el primer equipo del Barça hay 24 jugadores, con sus problemas, con sus negocios… Y que son sumamente inteligentes porque no solo juegan al fútbol, sino que también sufren estrés, aguantan presiones, tienen varios negocios…», explica Peláez. Estos jugadores han sido capaces de entender y asumir que si son uno más del equipo llegarán a ser los mejores, pero si quieren ser los mejores no lo conseguirán sin un colectivo. Aunque hay muchos ejemplos de ello, el más mediático es el de Leo Messi que gracias a ser uno más en el equipo ha llegado a ser el mejor jugador del mundo. 

    Sin duda, la charla de Peláez fue un gran ejemplo para entender la importancia de trabajar en equipo y del empoderamiento de todos los miembros para avanzar y mejorar juntos. Una filosofía que desde hace tiempo ya estamos aplicando en Voxel.

    Una vez más, ¡muchas gracias por tu charla, Raúl!